En 1995 el alemán Gunter Nimtz codificó la Sinfonía nº 40 de Mozart en un Rayo de Microondas que viajó a 4,7 veces C (Velocidad d la luz) desde el transmisor al receptor.
En el 2000 un equipo de físicos italianos reflejó un Rayo de Microondas en un espejo que alcanzó una medición de 125 por 100 de C.
El mismo año unos científicos de Princeton dispararon una pulsación de Láser a través de un aparato lleno de gas de Cesio; ¡¡La pulsación se detectó a la Salida del aparato <<antes>> de que hubiera llegado a la Entrada!!
Desde pequeñitos nos han enseñado la ley de Causa-Efecto (o Acción-Reacción), pero, si la pulsación de luz puede salir de un aparato experimental antes de entrar en él, ¡el efecto precede a la causa!
Tal vez algún día veamos ordenadores ópticos y redes de comunicación que funcionen más Rápido que la Luz. Y quizá algún día podría ser que recibamos la respuesta a un e-mail antes de haberlo enviado...
